Un ascensor en un edificio residencial de la ciudad rusa de Krasnoyarsk se precipitó el 11 de enero por el foso cuando en su interior se encontraban dos jóvenes y una mujer con un menor.
Afortunadamente, el sistema de emergencia activó los frenos automáticos, evitando una tragedia.
La administración del edificio explicó más tarde que el desperfecto técnico ocurrió a raíz de que el día anterior un vecino del piso 18 utilizó el ascensor para bajar en pocos viajes varias toneladas de residuos de construcción, excediendo el límite de peso máximo.
Además, la carga fue colocada de manera asimétrica, apilada cerca de la pared anterior de la cabina, provocando un desajuste del sistema de direccionamiento.
Se detalla que el aparato ya recibió el servicio de mantenimiento y funciona correctamente. Mientras tanto, la fiscalía regional ha iniciado una investigación.
