Un chico noruego entró en coma después de pasar 16 horas jugando al Call of Duty y tomarse cuatro litros de bebidas energéticas para conseguir soportar la sesión.
Se llama Henrik Eide Dahl y tiene 14 años de edad. Henrik estaba participando en una LAN Party en la cafetería de su instituto y se desmayó mientras que estaba jugando al Call of Dutty y después de tomarse una cantidad de bebida energética que excede la recomendación de consumo máximo de los fabricantes.
Según contó el chico: »Todo se volvió oscuro y me desmayé». Henrik ha pasado 13 días en el hospital y está siendo medicado para controlar la alta presión arterial.
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