”La desconfianza empezó cuando me di cuenta de que faltaba dinero en la caja. Entonces algunos clientes comenzaron a decirnos que deberíamos poner cámaras en la tienda porque había una persona robando el dinero de mi caja. Entonces mi esposa estaba planeando una forma de atrapar a esta persona con las manos en la masa, así que tuvimos la idea de poner una trampa para ratones en la caja y usé el teléfono para grabar el momento”.
Pillada: