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La demostración de que el cliente no sólo no tiene la razón, sino que es gilipollas

Chema, un conductor de autobús de Murcia pone a una clienta en su sitio… La demostración de que el cliente no sólo no tiene la razón, sino que es gilipollas…

Gracias Gerard y Alejandro | Envíanos tus aportes | (Vía)

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