Pintado con spray de color negro y pintura rosa, con las cuatro ruedas pinchadas y con un crucifijo encima del capó junto a dos ramos fúnebres. Así es como se encontró su coche María del Mar, convertido en lo que parecía un ataúd.
Esta mujer sevillana asegura que este macabro asunto es obra de su ex: »No tengo enemigos. Yo sé que es él. Gente mandada por mi expareja». En enero empezaron los trámites de separación, pero desde mayo su ex no para de amenazarla.
»Se enteró de que tengo pareja y a partir de ahí vienen las continuas amenazas». La mujer explica que también es el responsable de otros daños realizados con anterioridad a su vehículo.
María del Mar denunció todo y el ex fue detenido. Tras celebrarse un juicio rápido al que han asistido ambas partes, ha quedado en libertad provisional sin medidas cautelares.
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