El exgeneral bosniocroata Slobodan Praljak, de 72 años de edad, ha muerto este miércoles tras ingerir veneno durante la lectura de su última sentencia de apelación en el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) por crímenes de guerra. Prajlak, el mando militar que ordenó atacar el puente de Mostar, gritó que no era un criminal de guerra y a continuación bebió de un frasco ante la incredulidad de los presentes.
La lectura de la apelación discurría sin problemas cuando Slobodan alzó la voz y bebió del frasco que sacó de un bolsillo. Su abogada fue la que alertó de que se trataba de veneno. La sesión ha sido suspendida en medio de gran confusión.
El tribunal, con sede en La Haya, ha llamado a una ambulancia. Se ha abierto una investigación y la Sala 1 ha sido precintada porque es el lugar donde sucedieron los hechos.
La televisión croata avanzó, al cabo de dos horas, que el general había muerto. La noticia la confirmó más tarde el primer ministro croata, Andrej Plenković, que ofreció sus condolencias a la familia y fue crítico por la sentencia contra Praljak por considerarla injusta. Ampliar noticia en El País.
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